Diente molar

Cordal inferior, vista lateral

Dientes permanentes de Homo sapiens: mitad derecha del arco dentario inferior visto desde arriba.
Nombre y clasificación
Latín [TA]: dens molaris
TA A05.1.03.007
Gray pág.1118
Información anatómica
Arteria Arteria alveolar superior posterior

Los dientes molares (o muelas) tienen como función principal masticar y triturar (o molturar) los alimentos. Son característicos de mamíferos. Se corresponden con cada uno de los dientes posteriores a los premolares. En la mayoría de los mamíferos, sirven para moler o triturar los alimentos, por lo que su nombre viene de la muela de molino. En la dentición decidua son parecidos a los de la dentición permanente.

Los molares en el ser humano

Primer molar superior permanente

Este primer molar es el primero en erupcionar, siendo ésta la piedra angular de la oclusión. El primer signo de calcificación de este diente puede producirse incluso antes del nacimiento. El esmalte completo tardará de tres a cuatro años en completarse; brotará alrededor de los seis años, pero la raíz completa no estará formada hasta los nueve o diez años. Otras características son:

Ocluye con 3⁄4 partes distal del 1.er molar y 1⁄4 mesial del 2.º molar inferior., posee la corona más ancha en sentido vestibular-oclusal. Es el diente de mayor tamaño. Tiene cuatro cúspides funcionales: dos vestibulares y dos palatinas. Tiene una amplia superficie oclusal y es multifactorial además de contar con un fuerte soporte radicular. Relación con las atmns. Posee 3 raíces: 2 vestibulares y 1 palatina.

Cara vestibular

Características de la cara vestibular:

Cara palatina

Características de la cara palatina:

Cara mesial

Características de la cara mesial:

Cara distal

Características de la cara distal:

Cara oclusal

Características de la cara oclusal:

Segundo molar superior permanente

Esta pieza complementa al primer molar en su función. Las raíces de éstas son muy largas o aún más que las del primer molar, la cúspide disto palatina es más pequeña y no posee quinta cúspide. La calcificación comienza entre los 2 años o 2,5 años desde el nacimiento. El esmalte completo tardará entre 7 y 8 años en conformarse. El diente brota entre los 12 y 13 años, pero la raíz no estará completamente formada hasta los 14 o 16 años.

Otras características de esta pieza dental son:

Cara vestibular

La corona es:

Cara palatina

Cara mesial

La medida vestíbulo-lingual es más o menos la misma que la del primer molar, pero la longitud de la corona es menor. Las raíces no divergen tanto en sentido vestíbulo lingual; están dentro de los confines señalados por esas dos caras de la corona.

Cara distal

Dado que la cúspide disto-vestibular es más pequeña que en el primer molar, puede verse más de la mesiovestibular. Desde este ángulo no se puede observar la mesio-lingual. El ápice de la raíz lingual está en la línea de la cúspide distolingual.

Cara oclusal

El tipo más frecuente del segundo molar es el romboidal, aunque en comparaciones con el primer molar los ángulos agudos del área romboidal son menores, y los ángulos obtusos son mayores.

Otras formas que podemos observar en la cara oclusal de un segundo molar superior son:

Tipos de molares en los mamíferos

Existen varios tipos de molares de acuerdo a la forma, crecimiento, número y altura de las cúspides.[1]​ El molar típico de los mamíferos se conoce como molar tribosfénico, donde hay una cúspide lingual en el diente superior llamada protocono que cae sobre una depresión posterior del molar inferior llamada talónido. El molar tribosfénico superior está definido por un trígono (forma triangular) formado por tres cúspides (protocono, paracono y metacono) y el molar inferior por trigónido (igual que trígono, pero las denominaciones en el molar inferior terminan en "ido") con protocónido, paracónido y metacónido, y un talónido (depresión o valle) bordeado con tres cúspides (entoconido, hipoconido e hipoconúlido). Los distintos tipos de molares son modificaciones de este molar tribosfénico por adicción o perdida de cúspides y valles, y por la aparición de crestas que unen las cúspides. En los distintos grupos de mamíferos existe además la tendencia a la aparición de una cúspide labial secundaria en el molar superior llamada "hipocono". El hipocono se ha desarrollado al menos veinte veces independientes en distintos grupos de mamíferos y de distintas maneras.[2]

De acuerdo a la forma de sus cúspides, los molares pueden ser:

Estos distintos tipos de molares pueden combinarse. Por ejemplo los caballos poseen molares lofoselenodontes.[3]

Modelo general de diferentes morfologías de dientes molares (ilustrados por pares: molares superiores a la izquierda e inferiores a la derecha). 1) Molar tribosfénico; 2) Molar secodonto; 3) Molar bunodonto; 4) Molar selenodonto; 5) Molar lofodonto. T: talónido; a) Verde: paracono/paracónido; b) rojo: metacono/metacónido; c) azul: protocono/protocónido; f) celeste: hipocono/hipocónido; e) rosa: entocónido; verde oscuro: paraestilo/hipoconúlido; negro: cúspides secundarias

Nomenclatura de los molares

Teoría tribercular de la aparición de las cúspides

Las estructuras dentro de los molares reciben distintos nombres de acuerdo a su posición y morfología.[4]​ Esta nomenclatura fue desarrollada por Henry Fairfield Osborn y es, aunque con muchas variantes, la que continua vigente hoy.[5][6]

Algunos nombres particulares

Evolución del hipocono

Origen

Los dientes con múltiples cúspides de los mamíferos probablemente evolucionaron a partir de dientes de una sola cúspide en los sinápsidos, aunque la diversidad de patrones molares en los terápsidos y la complejidad de los primeros molares de los mamíferos hacen que sea imposible determinar cómo sucedió esto. De acuerdo con la "teoría de la diferenciación" ampliamente aceptada, han surgido cúspides adicionales por gemación o crecimiento de la corona, mientras que la "teoría de la concrescencia" rival propone que los dientes complejos evolucionaron por la agrupación de dientes cónicos originalmente separados. Generalmente se acepta que los mamíferos térios (placentarios y marsupiales) evolucionaron a partir de un ancestro con molares tribosfénicos, con tres cúspides principales dispuestas en un triángulo.[1][9]

Véase también

Referencias

  1. a b Kenneth D. Rose., ed. (2006). The begining of the Age of Mammals. Maryland: Johns Hopkins University Press. p. 27. ISBN 0801884721. 
  2. a b Hunter, J. P.; Jernvall, J. (7 de noviembre de 1995). «The hypocone as a key innovation in mammalian evolution». Proceedings of the National Academy of Sciences (en inglés) 92 (23): 10718-10722. ISSN 0027-8424. PMC 40683. PMID 7479871. doi:10.1073/pnas.92.23.10718. Consultado el 17 de junio de 2020. 
  3. Vizcaíno, Sergio F.; Kay, Richard F.; Bargo, M. Susana. (2012). Early Miocene paleobiology in Patagonia : high-latitude paleocommunities of the Santa Cruz Formation. Cambridge University Press. ISBN 978-1-139-56864-7. OCLC 812174473. Consultado el 4 de junio de 2020. 
  4. a b c d Osborn, Henry Fairfield; Gregory, William K. (1907). Evolution of mammalian molar teeth to and from the triangular type including collected and revised researches trituberculy and new sections on the forms and homologies of the molar teeth in the different orders of mammals, by Henry Fairfield Osborn ... Ed. by W. K. Gregory.. Macmillan,. Consultado el 17 de junio de 2020. 
  5. a b c MacCord, Katherine (2017). Arizona State University., ed. Development, evolution, and teeth: how we came to explain the morphological evolution of the mammalian dentition. 
  6. a b c Szalay, Frederick S. (1969). Mixodectidae, Microsyopidae, and the insectivore-primate transition. Bulletin of the AMNH ; v. 140, article 4 (en inglés estadounidense). Consultado el 17 de junio de 2020. 
  7. Butler, P.M. (1963). Dental Anthropology (en inglés). Elsevier. pp. 1-13. ISBN 978-0-08-009823-4. doi:10.1016/b978-0-08-009823-4.50005-7. Consultado el 17 de junio de 2020. 
  8. Valen, Van; M, Leigh (1966). Deltatheridia, a new order of mammals. Bulletin of the AMNH ; v. 132, article 1 (en inglés estadounidense). Consultado el 17 de diciembre de 2021. 
  9. Zhao, Z.; Weiss, K. M.; Stock, D. W. (29 de junio de 2000). Development and evolution of dentition patterns and their genetic basis. Cambridge University Press. pp. 152-172. Consultado el 1 de abril de 2022.