El Obelisco de Luxor erigido en la plaza de la Concordia, París

Un obelisco u óbelo (del idioma griego ὀβελίσκος - obeliskos, diminutivo irónico de ὀβελός - obelos: espeto, aguja) es un monumento pétreo con forma de pilar, de sección cuadrada, con cuatro caras trapezoidales iguales, ligeramente convergentes, rematado superiormente en una pequeña pirámide denominada piramidión. Generalmente se erigían sobre una base de piedra prismática. Los antiguos obeliscos se tallaron de un solo bloque de piedra (monolitos). El primero del que se tiene noticia se data en la época de Userkaf, faraón de la dinastía V de Egipto (c. 2500 a. C.). Se desconoce cómo eran erigidos estos monumentos, pues no hay ninguna documentación egipcia describiendo el método empleado.

Obeliscos antiguos

Antiguo Egipto

Los obeliscos se utilizaron de manera prominente en el Antiguo Egipto. Tallados en un solo bloque de piedra, generalmente se colocaban por pares a la entrada de los templos, junto a los pilonos. Durante la breve reforma religiosa de Akenatón se consideraban como rayos petrificados de Atón, el disco solar.

Obelisco de Tutmosis III, Estambul, Turquía

La mayoría de los obeliscos procedían de las canteras de granito de Asuán. Actualmente se conocen más de treinta obeliscos egipcios terminados y uno inacabado (hallado en dicha cantera).

Muchos obeliscos egipcios fueron llevados a Roma, la capital del imperio dominante. Posteriormente, otros imperios de occidente también se llevaron obeliscos egipcios para erigirlos en sus capitales, como es el caso del erigido en la Plaza de la Concordia en París.

Obelisco de Sesostris I, en Heliópolis (Egipto). Es el más antiguo que se conserva íntegro.
Piramidión del obelisco caído de Hatshepsut. Karnak (Egipto).
Obelisco inacabado. Asuán (Egipto).

Estas son las ubicaciones de los obeliscos más conocidos del Antiguo Egipto:

  • Ciudad del Vaticano:
  • Faraón Tutmosis III, Hipódromo de Constantinopla, Estambul (19,6 m)

Asiria

La forma de obelisco fue utilizada por la civilización asiria desde sus inicios. Ejemplo de ello es el obelisco negro de Salmanasar III, del siglo IX a. C., esculpido en una pieza de basalto de 1,98 metros de altura, donde se representan escenas de entrega de tributos. Fue descubierto en Nimrud y actualmente está expuesto en el Museo Británico.

Reino Axumita, Etiopía y Eritrea

Obelisco de Aksum en Etiopía.

El reino Axumita de Etiopía y Eritrea erigió varios obeliscos. El más notable es el obelisco de Aksum de 24 m de altura esculpido hacia el siglo IV a. C.. Este obelisco fue tomado por Italia al terminar la segunda guerra ítalo-etíope, llevado a Roma en 1937 y erigido en la Piazza di Porta Capena. En 2003, el gobierno italiano aceptó devolver este obelisco, que fue transportado por avión de vuelta a Axum, dividido en tres partes. El monumento fue erigido en su lugar original el 4 de septiembre de 2008.

Roma

Los romanos también esculpieron sus propios obeliscos al estilo antiguo , de los cuales se conocen:

Andes

Obeliscos de la Edad Contemporánea

Monumento a Washington, Estados Unidos.
Obelisco a los Constituyentes, Montevideo, Uruguay
El Obelisco de la Ciudad de Buenos Aires, Argentina.
Obelisco de Santiago, Chile.
Obelisco de Plaza de la Constitución, Chile.
Obelisco de Parque Forestal, Chile.
Obelisco de Actopan (Hidalgo), México.
Obelisco de la Plaza "Los Libertadores", Yacuiba, Bolivia.

En los últimos siglos se han erigido obeliscos por lo general de carácter conmemorativo. Están elaborados a imitación de los que se utilizaron en el Antiguo Egipto, en diversos tamaños y con variados materiales, pétreos normalmente, aunque los mayores no son monolíticos. Estos son algunos de ellos:

Siglo XVIII (pertenecientes a la Edad Moderna)
Siglo XIX
Siglo XX

Galería

Véase también

Obelisco de Nectanebo II

Referencias

Bibliografía